El tenista latino mejor ranqueado del momento (9º), Juan Martín Del Potro, superó la tercera ronda de Roland Garros tras vencer al croata Marin Cilic. Berdych, su rival de octavos, superó al sudafricano Kevin Anderson por 6-4, 3-6, 6-7 (4), 6-4 y 6-4.
A pesar de estar afectado por una molestia en la rodilla izquierda, que le provocó algunos contratiempos en su victoria de hoy y la del mièrcoles sobre Edouard Roger-Vasselin, la "Torre de Tandil" mostró un juego sólido en el partido contra Cilic.
Su brazo respondió con una efectividad del 68% en primeros saques, y en general ganó 16 de 19 tantos disputados cada vez que le tocó servir. Con esa tranquilidad, pudo pensar solamente en atacar a Cilic, que no tuvo ni la misma puntería (51% en primeros) y así atacó sobre pelotas más débiles, manejando el ritmo de juego con su derecha hasta lograr dos quiebres. Con el segundo de ellos definió el parcial por 6-3.
El segundo set volvió a presentar un trámite favorable a Del Potro, que logró explotar su potente derecha para colocarse 5-2 tras el tercer break del partido a su favor y un sólido game para confirmarlo. Sin embargo, en el momento de cerrar el set se quedó sin primeros servicios y comenzó a tener síntomas molestos en su físico.
Cilic percibió la chance, buscó reducir sus errores no forzados y obligar a Del Potro a desplazarse de un lado a otro para exigir su articulación dañada. La igualdad 5-5 le generó nuevas ilusiones.
Tras el rápido 6-5 de Del Potro, vino el juego más largo del partido. Del Potro tuvo un 0-40 a favor y con ello la chance de definir el set, pero Cilic resistió, salió de ese cuadro crítico y otros dos set points en contra hasta forzar el tie break.
Un excelente arranque de Del Potro le dio ventaja de 3-0, consiguiendo dos puntos sobre el saque del croata. Sin embargo, los errores no forzados del argentino y sus cada vez más evidentes problemas en la rodilla izquierda lo dejaron sin la movilidad necesaria para aprovechar la oportunidad.
De hecho, Cilic ganó cinco puntos seguidos hasta quedar 6-4 y disponer de doble set point, uno de ellos con su servicio. Pero la irregularidad era la ley del momento y también afectó al croata. El 6-6 parcial extendió la incógnita.
Al final, los saques de Del Potro y un punto milagroso en que ensayó un altísimo globo que cayó junto a la línea de banda le permitieron cerrar el asunto 9-7 para adelantarse dos sets a cero.
En la tercera manga, el argentino se mostró contundente y sentenció el partido con un contundente 6-1. "Delpo" dejó atrás su fastidio y con un tenis de alto vuelo acabó el juego en dos horas y 32 minutos.
"Trato de ni pensar en la rodilla, de jugar bien agresivo y ofensivo todo el tiempo, así puedo dominar el partido y no sentirme mal. Después de este torneo pararé y veré como sigo", confió el jugador, que se lesionó en el Masters 1000 de Madrid, en la primera semana de mayo, por lo que juega con un vendaje especial y realiza un tratamiento diario con un kinesiólogo para llegar de la mejor manera a los partidos.
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